La salud siempre ha estado estrechamente ligada con su entorno. Un nuevo estudio ha demostrado que privarnos de la naturaleza, aumenta las posibilidades de enfermarnos.
Es creciente el reconocimiento de la importancia de la naturaleza y el medio ambiente natural como factores determinantes de la salud humana y el bienestar. La investigación ha demostrado que la separación de la naturaleza provoca disminución del bienestar físico, mental, social y espiritual.
Estos fueron los resultados de una investigación llevada a cabo en la Universidad de Queensland, bajo la dirección del Dr. Richard Fuller; perteneciente a un centro de investigación del Gobierno de Australia.
Estar rodeados de "verde" mejora la capacidad de pensar, disminuye la violencia y la agresión en la comunidad. La conservación de la naturaleza en las ciudades, tales como la restauración de hábitats o la creación de reservas puede ser onerosa. Pero, ¿hasta qué punto resulta caro invertir en biodiversidad urbana si luego se ahorra en salud?
Estos fueron los resultados de una investigación llevada a cabo en la Universidad de Queensland, bajo la dirección del Dr. Richard Fuller; perteneciente a un centro de investigación del Gobierno de Australia.
Estar rodeados de "verde" mejora la capacidad de pensar, disminuye la violencia y la agresión en la comunidad. La conservación de la naturaleza en las ciudades, tales como la restauración de hábitats o la creación de reservas puede ser onerosa. Pero, ¿hasta qué punto resulta caro invertir en biodiversidad urbana si luego se ahorra en salud?
"la naturaleza ayuda a bajar las tasas de mortalidad"
Los estudios científicos evidencian que las experiencias que nos brinda el contacto con la naturaleza proporcionan importantes beneficios para nuestras vidas, incluyendo nuestra salud física y mental, las relaciones sociales e incluso nuestro bienestar espiritual.
Un estudio comparó los efectos del ejercicio en un espacio verde con el ejercicio realizado en un entorno urbano; el resultado fue una reducción del estrés en aquel practicado en bosques y parques, pero no en el que se realizó en zonas urbanizadas.
Otra investigación mostró que los niños mejoran su autoestima y bienestar general tras visitar parques y jardines.
También, pasar tiempo en la naturaleza puede ayudar a personas enfermas a que se recuperen más rápido. En este sentido el Dr. Fuller dijo: "Los pacientes en habitaciones con vista a los árboles pasan menos tiempo en los hospitales, requieren menos analgésicos potentes y tienen menos complicaciones posquirúrgicas que aquellos cuyas habitaciones tienen vista a una pared de ladrillos".
Además sostuvo que en Chicago la violencia y la agresión resultaron significativamente menores en aquellos edificios con vegetación circundante.
Las propiedades reconstituyentes de la naturaleza pueden mejorar la capacidad de una persona para hacer frente a difíciles tareas mentales. Ello se debe a que constantemente dirigimos nuestra atención a evitar los riesgos y hacer frente a ruidos y lugares de interés en los entornos urbanos. Todo ello requiere de esfuerzo sostenido, lo que puede provocar fatiga mental y reducir la capacidad de concentración.
Un test de secuencia de números en orden inverso realizado sobre estudiantes mostró que aquellos que caminaban hacia sus casas por las calles de la ciudad no tuvieron buenos resultados en comparación con quienes habían caminado a través de un bosque con árboles.
Tampoco dan lo mismo las vacaciones en cualquier lugar. En este caso, el estudio puso a prueba las capacidades de las personas para corregir. Si bien quienes pasaron sus vacaciones en el desierto cometieron algunos errores, el rendimiento de quienes la pasaron en otros lugares resultó más pobre.
Todos los días conocemos más pruebas de que "contar con espacios verdes cerca de nosotros tiene un impacto positivo en nuestras vidas", dijo el Dr. Fuller.
