21 de noviembre de 2013

El procedimiento corriente de trabajo de la mayoría de los hospitales requiere un consumo de energía considerable – para el calentamiento del agua, los controles de la temperatura y la humedad del aire en interiores, la iluminación, la ventilación y numerosos procesos clínicos – con considerables emisiones de gases de efecto invernadero asociadas. Los hospitales pueden introducir muchas medidas destinadas a mejorar la eficiencia energética, al tiempo que satisfacen las necesidades de energía de estos importantes usos finales.
 Utilizando una tecnología que permita combinar la generación de energía destinada a calefacción y electricidad, por ejemplo, los centros hospitalarios pueden generar in situ electricidad y captar el calor residual del proceso de generación como energía térmica.
Primer hospital chileno creado con la modalidad de arquitectura sustentable.
Hospital Ñubles
Esto puede duplicar la eficiencia energética al eliminar las pérdidas asociadas al suministro de electricidad de la red eléctrica. Según un estudio, en Brasil, los hospitales tienen un potencial técnico de 500 MW de tecnología combinada de calor y electricidad. Además, esta tecnología incrementa la fiabilidad, debido a que el suministro de esta energía no se interrumpe cuando se produce un fallo en la red.

Medidas menores como adoptar el uso de bombillas de luz fluorescente compacta y diodos emisores de luz (LED), bajar o subir los termostatos unos pocos grados durante el invierno y el verano, comprar productos de bajo consumo, reducir el uso de aparatos que queden con un piloto encendido, y reformar los edificios para que generen menos residuos energéticos, pueden ejercer un impacto importante. Las medidas de eficiencia energética constituyen el medio más fácil y más común, además de ser el primer paso más importante, que los hospitales pueden adoptar para recortar los costes, reducir las emisiones y mejorar la salud humana y medioambiental.
Existen varios ejemplos de hospitales sustentables en el mundo, pero mencionaremos el proyecto del primer hospital sustentable en Chile, que se construirá en Ñuble, a mediados del 2014. El edificio integrará elementos de conservación energética, instalaciones que permitirán mantener la calefacción manteniendo temperaturas estabilizadas y tratará la fachada a través de puentes térmicos